Guía de sanitización en tu local comercial
Con la entrada del COVID-19, las plazas comerciales comenzaron con los protocolos de sanitización con el objetivo de ofrecer espacios seguros de bajo riesgo de contagio, por lo que realizar una guía para elaborar un plan efectivo es de vital importancia.

Precauciones
No podemos olvidar que el objetivo principal es la prevención del contagio y garantizar la salud, por lo que, antes de comenzar con la sanitización, es importante tomar las medidas preventivas necesarias.
En primer lugar, se debe recurrir a medidas de protección para la piel, ojos y manos. Cuida la ventilación del espacio, además de verificar la forma de uso de cada producto.
Por norma general, los productos cuentan con instrucciones, donde se especifica la forma correcta de uso.
Cabe destacar que
se debe evitar a toda costa la mezcla de productos. Así mismo, las personas con enfermedades, como asma, deben tener especial cuidado con las tareas de sanitización.
Reducción del riesgo de exposición
Un paso imprescindible, para la prevención del COVID-19, es buscar la reducción del riesgo de exposición.
La reducción de riesgo comienza desde la limpieza normal rutinaria y efectiva con agua y jabón para todas las superficies.
Al igual que, a nivel personal, la práctica del distanciamiento social, el uso correcto del cubrebocas, así como las normas de higiene personal como el frecuente lavado de manos con agua y jabón y el uso de desinfectante con una base de mínimo 60% de alcohol.
Plan para limpiar y desinfectar
Para elaborar un plan de limpieza y sanitización eficaz, es necesario evaluar el espacio. Es decir, ¿Cuál es su función? ¿Qué tipo de superficies están presentes? ¿Con qué objetos, materiales o instrumentos?
Esto se debe a que, dependiendo del giro del local comercial, existen espacios más concurridos que otros.
Por otra parte, una vez identificado el tipo de superficies, puedes seleccionar algunos de los productos desinfectantes que han sido aprobados para su uso.
En cuanto a los materiales, se debe evaluar ¿cuáles son imprescindibles y cuáles no? Lo mejor es buscar una estrategia para distribuir el local de forma que propicie el tránsito fluido de las personas.
Así mismo, al diseñar un plan de desinfección también debe considerarse el mantenimiento de ese espacio, delegar tareas, asignar tiempos e integrarlos a las circunstancias de cada negocio.
Por supuesto, dentro del plan, debe incluirse el personal del local, es decir, ¿cómo se modificarán sus formas de trabajo e interacción entre ellos o con el cliente? Al igual que identificar el equipo que se proporcionará para su seguridad.
Elabore el plan
Para comenzar a elaborar el plan para sanitizar, primero deberás determinar qué debe limpiarse y cuándo debe realizarse esta acción.
Asegúrate de establecer prioridades, cuidando hasta los pequeños detalles, además de seleccionar el desinfectante adecuado para cada localización, tomando en cuenta los aspectos señalados con anterioridad.
Como ya mencionamos, algunos espacios u objetos son utilizados con mayor frecuencia en un local, por lo que deberás identificar si su uso es o no indispensable.
Como prioridad se encuentran objetos como manijas de puertas, teléfonos, interruptores de luz, pantallas táctiles, mesas, lavabos, etc. Sin embargo, todo dependerá del tipo de local.
Segundo, identifica los recursos necesarios y el equipo que necesitas.
El equipo de protección es una pieza indispensable para proteger la piel y la vista de los productos utilizados en este proceso.
Una vez realices un inventario de aquellos productos de los que debes abastecerte y trazarte un recorrido para comenzar a desinfectar, debes integrar a tu equipo de trabajo.
Recuerda que además de la sanitización antes de la apertura al público, el mantenimiento es indispensable para mantener el lugar como un espacio sin riesgos de contagio, por lo que deberás crear políticas que capaciten y protejan a tu equipo.
Implementa el plan
El momento más importante es la implementación, pues podrás observar la efectividad del plan que trazaste.
Toma tu equipo, instrumentos y materiales y comienza la desinfección según el orden que estableciste para cada espacio.
Comienza con una limpieza detallada con agua y jabón en las superficies y objetos. Recuerda, como mencionamos con anterioridad, los productos establecen en la etiqueta sobre cuáles superficies son efectivos, además de las contraindicaciones.
Asegúrate de desinfectar los instrumentos que sean reutilizables, mantener la rutina que diseñaste, además de seguir los protocolos de interacción.
Revisa tu plan
En la situación actual, la información se actualiza de forma constante, por lo que deberás revisar tu plan con frecuencia de forma que conserves los espacios de tu local seguros y con bajo riesgo de contagio.
Recuerda prestar atención a las indicaciones y recomendaciones de las autoridades correspondientes, al igual que propiciar el correcto seguimiento de la rutina diseñada con el apoyo de señalizaciones, tanto para los trabajadores como los consumidores.
Como parte de los protocolos para interactuar, el local debe proveer de dispensadores de gel antibacterial y regular el ingreso con la toma de temperatura.
Finalmente, la prevención es la principal herramienta para mantener la seguridad de todos, por lo que diseñar un plan de sanitización adecuado y personalizado para tu local, es uno de los elementos con mayor relevancia.
En la presente guía te brindamos los dos ejes centrales para diseñar un buen plan de sanitización, pues informarse es uno de los elementos más importantes para estructurarlo, además de integrar las recomendaciones mencionadas.
Recuerda que la rutina de sanitización, hábitos de higiene y limpieza son fundamentales para mantener las operaciones de tu local de forma segura y fluida, toma nota y elabora tu plan de sanitización.
Si quieres saber cómo crear una experiencia agradable en tu negocio, a pesar de la nueva normalidad, haz clic
aquí.