El éxito y las aptitudes sociales
La autoestima y las habilidades sociales juegan un papel mucho más importante de lo que crees para lograr el éxito en los negocios. Identificar las áreas que necesitas fortalecer para conectar con los demás y trabajar en ellas, te llevará a conseguir el éxito que estás buscando.

La necesidad de pertenencia
El sentido de que algo es propiedad de una persona, se le conoce como sentido de pertenencia. En el ámbito social, la pertenencia significa formar parte de un grupo, comunidad u otro conjunto de personas.
Ser parte de un grupo o colectivo, es pertenecer, para esto, debemos entender que nuestra individualidad es parte importante de estar en un equipo, pues nuestros valores, sentimientos y comportamiento, son factores que influyen en el impacto que tenemos en otros.
El sentido de pertenencia social se puede hacer presente de maneras diversas: uno puede sentirse parte de una nación, de una religión, de una convicción o creencia política o simplemente ser admirador en conjunto con otras personas de determinados estilos y grupos artísticos, deportivos o culturales.
Cuanto mayor sea el sentido de pertenencia de tus colaboradores, mayor será su compromiso con la empresa y por consiguiente el potencial de éxito aumentará.
Ya que somos seres sociales, sentir que mantenemos relaciones con otras personas logra aumentar y mejorar nuestra autoestima, nos sentimos reconocidos y podemos confiar en quienes nos rodean.
Cómo relacionarse con los demás
Formar una empresa desde cero, no es nada fácil, pero al margen de lo bien que prepares tu estrategia de ventas, para cumplir tus objetivos, si no mejoras tu don de gentes, no lograrás progresar en la vida. Existen factores que nos benefician para poder establecer buenas relaciones, un ejemplo de ello es la autoestima.
Tener una buena autoestima consiste en apreciar nuestras habilidades, posibilidades y también nuestros fracasos, debilidades y errores; entender que todos éstos forman parte de nosotros, por lo que necesitamos aceptarlos y demostrar que es así.
También, tenemos que hacernos responsables de nuestras acciones, incluso de nuestros errores, demostrar que somos lo suficientemente maduros y honestos para responsabilizarnos de nuestros actos.
Cuando llegamos a equivocarnos tenemos que entender que somos humanos y que es normal equivocarse, debemos tenernos compasión y comprendernos a nosotros mismos, darnos la oportunidad de reestablecernos y ser aún mejores.
Por otro lado, está la empatía, que es una conducta social que nos hace entender lo que otras personas sienten en diferentes ocasiones de su vida. Ésta, más allá de hacernos buenas personas, nos hace personas comprensivas, una persona a la que un amigo acudiría si necesita ser escuchado.
La empatía nos permitirá ver las necesidades de los demás y ofrecer realmente lo que están buscando, lo cual nos convertirá en excelentes vendedores. Sigue las 7 claves para convertirte en un vendedor potencial.
Al perseguir nuestras metas no podemos evitar a los demás. En muchos sentidos, los demás son la meta tanto como el medio para alcanzarla. Sin la habilidad para tratar con los demás, estamos completamente desarmados en el mundo del emprendimiento.
Encontrar a las personas afines
Todos tenemos gustos y habilidades diferentes, pero sin duda podemos encontrar personas con aficiones similares a las de nosotros. Justamente esas son las personas que deben rodearte en tu nuevo negocio.
Es importante que tus colaboradores compartan tus metas, intereses y objetivos laborales; que estén interesados en el giro del negocio y tengan entusiasmo por hacer crecer la empresa.
Hazlos sentir parte de tu estrategia y tu visión, comparte con ellos tu filosofía y ayúdalos a identificar cómo y en qué medida pueden contribuir a cumplir los objetivos que has trazado.
Aprender a estar consigo mismo
Estar solos no es algo malo, de hecho, nos da la oportunidad de ser nosotros mismos, encontrarnos, conocernos, y darnos cuenta de qué es lo que nos hace felices verdaderamente.
Nunca nos enseñan a estar solos, y en el fondo a casi nadie le gusta la soledad. Pero no olvides que tú eres la mejor compañía para ti, y que debes aprender a vivir contigo mismo. Si aprendes a valorarte a ti mismo, tu autoestima se verá fortalecida.
Por el contrario, una baja autoestima produce miedo al fracaso. Aunado a esto, existe una relación directa entre nuestra autoestima y la capacidad e llevarnos bien con los demás. Es decir, una baja autoestima ocasionará que tengas mayor dificultad para establecer relaciones sociales.
Cuanto más te agrades a ti mismo y te respetes, más podrás querer y respetar a los demás. Si tú te consideras una persona valiosa y digna de interés, podrás encontrar el valor de las personas e interesarte en ellas. Cuando tus clientes comiencen a percibir esa vibra, vendrán hacia ti como si fueras el Flautista de Hamelin.
El éxito en las ventas y en cualquier emprendimiento que realices, además de la estrategia, el conocimiento de tu cliente y toda la planeación, depende de ti y de tus habilidades sociales.
Debes centrarte en redefinir las ideas y rasgos que socavan tu autoestima. Pensar de un modo más positivo sobre los que te rodean es un elemento importante para mejorar tu visión de ti mismo.
Desarrollar nuestras aptitudes sociales es vital para tratar con nuestros colaboradores, proveedores y clientes.